Por Roberto Salvador
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13 de junio de 2022
Se avecina una subida de tipos por parte del ECB después de las "rápidas" subidas por parte de su homólogo estadounidense. Desde hace ya un tiempo la duda no era si se iba a producir o no, sino cuándo y cuánto. Las principales reacciones en los temas macro son de sobra conocidas, el euro deberá reducir la pendiente vertiginosa de devaluación frente al dólar, la masa monetaria se reducirá frenando la inflación galopante pero, ¿Qué efectos vamos a ver en los mercados de crédito y renta variable? Vamos por partes, en la renta fija los bonos gubernamentales y corporativos van a sufrir considerablemente. Durante una década hemos visto a detractores de la renta fija afirmar que era completamente imposible que los tipos de referencia pudiesen bajar más, equivocándose año tras año y reunión tras reunión. Ahora que la decisión se toma más por necesidad que por previsión y viendo lo poco ágil, por no decir torpe, que es el ECB, parece que hay un consenso en que estas subidas se van a producir sesgando la época dorada que hemos vivido en los mercados de renta fija. Las primas de riesgo de los paises periféricos han volado durante las ultimas semanas, a pesar de los esfuerzos e intenciones de seguir recomprando su deuda por parte del BCE.